Título: Titan A.E.
Autor: Dal Perry y Steve Perry
Editorial: Ediciones B
Año: 2000
Páginas: 265
Calificación: 8/10
Sinopsis: Quince años después de la desaparición de la Tierra, Cale Tucker todavía recuerda la invasión de los drej, los alienígenas. Con los supervivientes humanos dispersos por toda la galaxia, incluso ha olvidado lo que es soñar. Hasta que descubre un mapa que le ha dejado su padre, un brillante científico. En él se revela la localización de una nave espacial legendaria: el Titan. ¿De dónde procedía? ¿Con qué intención lo construyeron? ¿Qué secretos ocultaba en su interior? En el transcurso de ese viaje apasionante, Cale descubrirá su obligación de hallar las respuestas porque él es la última esperanza de la humanidad.
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"Titan A.E." Es una obra recomendable. La manera en la que presenta el escenario donde se desenvuelve la historia de Cale, nuestro protagonista, es muy buena. La historia es sólida y conclusiva, y la forma de contarla se centra mucho en la descripción de los momentos y acciones, más que la de los personajes. Esto logra darle rienda suelta a la imaginación para poder darles forma propia, aunque respetando ciertos parámetros establecidos por el autor.
La historia, si bien solida, no me convenció del todo. Particularmente no es mala, pero si muy cliché. Cuando me encontraba en un momento de "suspenso", ya podía suponer lo que iba a pasar después. Quizás es por mi hábito de lectura, o por ver muchas películas, pero sentía que ya había experimentado una historia similar. Esto no quita que no me haya enganchado, pero lo hice más por el ambiente y por el "paseo" que por los interrogantes que surgieron en la narración.
Un protagonista rebelde, se entera que tiene el legado de salvar a la humanidad, pero es muy egoísta para hacerlo. Cree que puede sacar un provecho personal de la aventura y por eso la emprende. Se enamora de una chica, muy comprometida por la causa, y ella le muestra que la realidad no es tan simple y por qué es necesario ayudar a la humanidad. El resto se lo pueden imaginar ustedes.
Lo único que destaco de la historia es el clímax; cómo en unas cuantas páginas se deshace el nudo y se llega a una conclusión que, si bien tiene algunas cosas mejorables, no deja cabos sueltos.
Hay que destacar la ambientación. El mundo donde transcurre la historia está excelentemente logrado. Lleno de vida y detalle, sin duda es el punto más alto de la novela. Una humanidad errante, viviendo de la caridad alienígena, sin un planeta que puedan llamar propio, vive discriminación pero está -por fin- unida bajo un gran sentimiento comunitario. Por otro lado, un imperio galáctico en constante expansión la ve como una amenaza que tiene que ser erradicada. Todo esto lo muestra de una forma completamente natural, con razas muy bien logradas y culturalmente diferentes.
Teniendo en cuenta esta gran ambientación, considero que hay una oportunidad perdida de dar un mensaje social profundo. Si bien tocan el tema de la comunidad y de la unión, es algo muy vago que parece más una excusa para continuar la historia.
La recomiendo mucho para los amantes de la aventura y la ciencia ficción. La ambientación futurista y el contexto en el que surge la historia del protagonista está muy bien lograda y el libro merece ser leído por esa razón. El relato , si bien es sólido, también es cliché y me dejó con ganas de un suspenso o un giro más inesperado. La historia de amor que se presenta es interesante, y la manera en la que se desenvuelve la aventura motiva al lector a seguir leyendo, aunque no es nada especial ni sorprendente. Considero que cualquier persona que le fascine este género le va a encantar, ya que cumple con todos los requisitos de una muy buena novela de aventura y ciencia ficción. Por último, remarco la oportunidad perdida de transmitir un mensaje social profundo que de lugar a la reflexión, teniendo en cuenta el mundo y la situación que se presenta en el libro.